"El 7% de la población tiene sintomas de reflujo gastroesofágio a diario"
Este fenómeno físico tan común entre la población consiste en el paso de contenido gástrico desde el estómago al esófago debido a la alteración de los mecanismos de barrera a ese nivel.
Suele describirse como una molestia en forma de ardor localizada por detrás del esternón que sube hacia el cuello y la garganta. Estos síntomas pueden durar varias horas y se agravan después de comer. Si esto se sufre ocasionalmente, varias veces por semana, mostrando pérdidas de peso o sangre podría tratarse de un problema mas grave conocido como la enfermedad de reflujo gastroesófagico (ERGE)
Una de las causas más importantes y conocidas es la alteración a nivel del esfínter esofágico inferior, que es un anillo muscular que rodea al esófago en su unión con el estómago, y permanece cerrado impidiendo que el contenido del estómago (jugos gástricos) vuelva de nuevo al esófago. Los jugos gástricos se componen de ácido, enzimas digestivas, y otros materiales perjudiciales; y el contacto prolongado de estos jugos gástricos ácidos con el revestimiento esofágico lesiona al esófago, produciendo una molestia en forma de ardor.
El tratamiento farmacológico del reflujo esofágico, en este caso va dirigido a inhibir la secreción ácida del estómago para disminuir el factor agresivo responsable de los síntomas.En los pacientes con síntomas intensos y continuos está indicado el uso de inhibidores de la bomba de protones (IBP), como omeprazol, pantoprazol, lansoprazol y rabeprazol. Si no desaparecen los síntomas, se aumentarán las dosis de los IBP.
Otros fármacos utilizados son los antagonistas del receptor H2. Los bloqueadores H2 mejoran los síntomas de acidez estomacal y regurgitación, y constituyen un excelente medio de disminución del flujo del ácido estomacal, colaborando así con el proceso de cicatrización de la irritación leve a moderada del esófago (esofagitis).
Hay ciertos consejos que se deben seguir para prevenir o evitar este problema tan frecuente. Por ejemplo evitar el sobrepeso y llevar un estado de vida lo más saludable posible. En cuanto a la alimentación es necesario evitar comidas copiosas y altas en grasas, por lo tanto hay que hacer una cierta selección con los alimentos.
La ropa también es un factor importante ya que las prendas flojas evitan la presión en la zona del estómago y evitan estos incómodos síntomas.