La hernia de hiato se produce cuando la porción superior del estómago asciende hasta el tórax a través de una pequeña apertura que existe en el diafragma. A esta apertura se le denomina hiato diafragmático.
La hernia de hiato se produce debido al debilitamiento del diafragma, que además de por factores genéticos puede producirse debido a:
La hernia de hiato se produce debido al debilitamiento del diafragma, que además de por factores genéticos puede producirse debido a:
- Envejecimiento.
- Tos crónica.
- Estreñimiento.
- Obesidad.
- Estrés.
- Tabaquismo.
- Cirugías.
- Levantamiento de objetos muy pesados.
Esta patología no siempre produce los mismos síntomas, pero en la mayoria de los casos existe reflujo gastroesofágico, por lo que los síntomas son el resultado del ascenso de líquido estomacal por el esófago, produciendo irritación de su mucosa debido al ácido gástrico:
- Pirosis: Es el ardor en el esófago debido a que el contenido ácido irrita las paredes del esófago.
- Dolor de pecho.
- Dificultad a la hora de tragar.
- Regurgitación y eructos.
- Mal sabor de boca.
- Tos.
Las pruebas que se utilizan para realizar el diagnóstico de la hernia de hiato los más utilizados son la radiografía con papilla de bario, que es un método muy claro para reconocerla. En casos muy graves, donde la hernia es de gran volumen, también se puede observar con una simple radiografía de torax.
Otros métodos diagnóstico como la pHmetría permiten determinar la presencia de ácido en el esófago procedente del estómago. La manometría puede detectar grados de presión diferentes a los de un esófago normal.
La endoscopia o la gastroscopia también permitirá visualizar las zonas del esófago irritadas y permitirá incluso tomar biopsias.
Esta enfermedad no produce complicaciones salvo que se acompañe de un estrangulamiento de la porción del estómago que ha ascendido, lo que puede tener como consecuencia un necrosamiento de esta parte, o de una hemorragia. La hemorragia puede provocar anemia. La mayoría de los problemas asociados provienen de la acción del ácido sobre las paredes esofágicas provocando incluso patologías como el esófago de Barrett. En casos muy extremos, la acción continuada del ácido puede llegar a causar cáncer de esófago.
La mayoría de casos en los que hay hernias de hiato no se requiere tratamiento, aunque si los síntomas son muy claros, se tatará mediante:
- Medidas higiénico-dietéticas: Se deben evitar medidas copiosas, ricas en grasas o picantes. Conviene realizar un mayor número de ingestas pero de menor cantidad. Así mismo se debe evitar fumar y beber alcohol, y en caso de obesidad debes disminuir de peso. Además se recomienda esperar dos horas desde la última comida antes de acostarse y elevando el cabecero de la cama unos 20cm.
- Tratamiento farmacológico: Se iniciará un tratamiento con inhibidores de la bomba de protones o antagonistas de la histamina-2. También se añaden medicamentos que ayuden a propulsar el alimento hacia el estómago.
- En casos más extremos se recurrirá a un tratamiento quirúrgico.
Los escritores del blog os podemos dar una serie de recomendaciones para la prevención la hernia de hiato:
- Mantener el peso en los límites saludables, ya que como ya hemos mencionado, la obesidad es un factor de riesgo.
- Reducción o supresión del consumo de tabaco.
- Evitar las comidas pesadas que requieren una digestión más complicada.
- Evitar levantar sin ayuda objetos muy pesados sin ayuda.
- Métodos de relajación hacen que disminuya el estrés, otro factor de riesgo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario